No hay fronteras de ninguna clase en este programa doble. Por un lado, la peculiar fusión de folk balcánico, metales zíngaros, sevdalinka bosnia, rembetiko griego o klezmer judío del legendario músico serbobosnio Goran Bregoviç. Por el otro, la mezcla de funk, música disco, dub, folk y electrónica de los napolitanos Nu Genea. ¿Músicas del mundo? Sin duda. Aquí y ahora, más que nunca.
No es exagerado afirmar que nadie ha exportado mejor el sonido de los Balcanes durante las últimas décadas que Goran Bregoviç. Y no precisamente porque representa a Serbia en Eurovisión 2010. Sino porque su música, en conjunto, es sinónimo de fanfarria, de fiesta, de hermandad entre pueblos, de verbena en el más popular y noble de los sentidos. Sus canciones se han paseado por medio mundo, y su empeño por adaptarse a múltiples entornos y formatos escénicos han convertido a este veterano guitarrista, compositor, arreglista y productor serbobosnio en un músico insustituible. Su peculiar fusión de folk balcánico, metales zíngaros, sevdalinka bosnia, rembetiko griego o klezmer judío han hecho de su propuesta una de las más reconocibles músicas del mundo (por reformular aquella vieja etiqueta de world music), a lo largo de una fértil y multidisciplinar carrera en la que Bregoviç ha colaborado con músicos de la talla de Scott Walker, Iggy Pop, Ofra Haza, Cesária Évora, Gypsy Kings, Eugene Hutz (Gogol Bordello) o Stephan Eicher.
Nu Genea son, por su parte, un proyecto comandado desde Nápoles (Italia) por Lucio Aquilina y Massimo Di Lena, que funde funk, música disco, dub, folk, electrónica y músicas del mundo con una fluidez encomiable. Antes se hacían llamar Nu Guinea. Su último álbum es Bar Mediterraneo (2021), brillante último capítulo de una carrera que despegó tras su alianza con Tony Allen – batería de Fela Kuti – en aquel The Tony Allen Experiments (2015), y que ha recorrido el mundo desde entonces con una fórmula cálida y seductora. El mediterráneo hecho música. Directamente.
En Noches del Botánico creemos que para disfrutar la cultura no hay edad, es por eso que al recinto podrán acceder todos los menores indistintamente de su edad. Estos deberán acceder con su correspondiente entrada y acompañados por su padre, madre o tutor legal.
Si la edad del menor es inferior a los 16 años deberá asistir siempre acompañado por su padre, madre o tutor legal.